dijous, 18 de juliol del 2013

Consecuencias imprevistas de la momificación de los héroes


Joan Tafalla

La noticia reza de hoy reza así: "Mandela celebra su 95º cumpleaños con una mejora en su salud. El líder de la lucha antiapartheid se comunica con las manos y los ojos, revela su hija Zindzi. Numerosos actos en todo el mundo recuerdan este jueves el Día Internacional de Mandela".
Por mi parte, creo que deberían dejar que Madela partiera en paz. Quienes le encarcelaron y algunos de sus "amigos", le mantienen en la cárcel de su cuerpo. Todo con tal de usar el mito popular para los intereses espúreos de la clase política que rige actualmente la República Sudafricana.

Pongo dos ejemplos de lo que digo, sin rebuscar mucho: 

Personalmente, me quedo con el Mandela de la lucha contra el apartheid. No me gustan el Mandela y el ANC de la transición para acá. Y aún menos el de sus sucesores en la dirección del ANC.
Se santifica, se embalsama a los héroes fundadores y luego se los traiciona invocando su nombre y rindiéndoles un culto. ¿Será una ley histórica?


Un ejemplo de momificación y al mismo tiempo de adulteración del pensamiento y la obra de un líder fue el caso de Lenin. Él no quería ser enterrado en el Kremlin, ni mucho menos ser momificado. Pero fue momificado, transformado en icono, mientras sus sucesores emprendían políticas que él no hubiera aprobado.
Se trata de una costumbre de larga duración en la historia. Algunos de los precedentes:


a.- La casta feudal-esclavista del Tíbet explotó ese territorio durante siglos y siglos en nombre de las enseñanzas del Gautama-Buda.


b.- La secta que domina el Vaticano en nombre de las enseñanzas de Cristo. ¿Qué tiene que ver la teologia de Pablo con el de la Sermón de la Montaña? No hablemos ya la teología de Ratzinger.


c.- El grupo de poder de la orden franciscana que ha dominado esa organización cristiana en nombre de las enseñanzas de Francesco. Le extorsionaron el testamento de Francisco de Asis para convertir una enseñanza revolucionaria en medio de cooptación.
De hecho, la momificación de Lenin para a continuación inventar el "marxismo-leninismo", y censurar y traicionar su obra, no deja de ser un triunfo de la continuidad histórico-cultural sobre el intento radical de una ruptura puntual muy profunda que fuera como fue la revolución de los campesinos-soldados y de los obreros rusos en 1917.


Las circunstancias adversas en la construcción del estado revolucionario, llevaron a usar a la vieja burocracia estatal. Ésta se alió con una parte de los nuevos cuadros del partido, ingresados después de la victoria y usando la teoría elitista de la vanguardia que insufla la conciencia de clase desde fuera, acabaron creando un nuevo estado muy diferente de aquello que prometía "El Estado y la Revolución".


Contradictoriamente, y quizás por que las grandes masas necesitan mitos fundadores y religiones organizadoras de su vida, el impulso revolucionario de octubre impulsó grandes transformaciones y luchas en todo el mundo (frentes populares, resistencias antifascistas, segunda guerra mundial, luchas descolonizadoras, la lucha contra el racismo en los USA y en Sudáfrica, la revolución china, Vietnam, Indonesia, resistencia antifranquista e via dicendo). Gramsci nos ha dejado importantes y desgarradoras reflexiones respecto al papel movilizador y/o consolador de los mitos y religiones populares.


La operación cultural-política-represiva que fue la momificación del cuerpo y de la doctrina de Lenin comportaba, a largo plazo el agotamiento del impulso revolucionario de octubre que se produjo unos setenta años después. 


Las consecuencias de todo ello se viven todavía.

Biblografía:

Georges Labica: Le Marxisme-léninismeéléments pour une critiqueEditions Bruno Huisman, 1984), 

Maximilien Rubel: Marx sin mito, Madrid, Octaedro, 2003;  

Montserrat Galzeran, La invención del marxismo (estudio sobre la formación del marxismo en la Socialdemocracia alemana de finales del s. XIX), Madrid, Iepala, 1997 ),