Primero como una farsa. En segundo lugar, también

David Rodriguez, escritor.

El presente recuerda los tiempos de la transición: una farsa más que una tragedia

La disfuncionalidad del R78 es la disfuncionalidad del PSOE. Sólo ese partido puede articular el régimen en términos de hegemonía, no de dominación. Por eso los de la rosa fueron los encargados de la Reconversión, de los GAL, de la desregulación laboral y del 135. El fortalecimiento del PSOE es una condición necesaria para estabilizar la II Restauración borbónica filipina

El PP alimenta el miedo a la extrema derecha en Valencia y hace "constitucionalismo" a Gasteiz y Barcelona dejando gobernar a Sagasta. El PSOE corresponde a Iruña. En A Coruña y Compostela dificulta la visualización de la alternativa al PPdeG, por si Rueda pierde las elecciones autonómicas. La alerta antifa es buena para el régimen: concentra el voto progresista y disciplina el mundo post-15M. La producción de indepes en cantidades industriales (Otegi dixit) es un daño colateral. Mientras, Zarzalejos convoca el espíritu del apparatchik Rubalcaba, cuerpo en el suelo.

Sumar es la farsa de la farsa carrilista. Euroecología postcomunista. Entonces había que pasar por el aro para evitar la continuidad del franquismo. Ahora, para detener a Vox. Pero Vox es un producto del estado profundo, no un fenómeno marginal (como los ultras en el resto de Europa). Ni el PCE rogigualdo evitó la continuidad del franquismo ni esto, en la escisión voxista, es neo, sino paleo.

El esquematismo analítico de la izquierda estatal sería inútil si no fuera malicioso. Por eso las únicas burguesías que identifica son la catalana y la vasca. El capitalismo, por lo demás, consiste en la abstracción de flujos globales o en la hiperconcreción individual: Florentino Pérez. Mover la lente demasiado lejos o acercarla demasiado, dos formas de desenfocar para evitar el desenfoque: el Estado. Por eso sacan el pecho echando de la Alcaldía de Barcelona a la burguesía sin Estado para un mayor disfrute de la burguesía con Estado.

Este PCE, que abjuró del leninismo, y de sus satélites, recuerda más a los partidos de la II Internacional que a los de la III. Por eso naturaliza el Estado y te hace creer que la alternativa es entre corporativismo sindical vs. capital, o de economicismo vs. política. Pero la dialéctica está entre cierre y apertura, entre españolismo y plurinacionalidad, entre involución y democratización, entre estabilidad y posibilidad. Al día siguiente del 23 de julio se reprocharán esto, y nos seguro aburriendo a todos.

Traducción: Joan Tafalla, Sabadell, 23 de junio de 2023.

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Primeiro como farsa. Segundo, tamén